Pintura:Do-Duy-Tuan
La semilla palpita
al calor
de las entrañas
para erguirse
en la luz
de lo verde
La vida no se para,
cerca de mí
se ensancha el cielo.
Tiempos
de cuna y sueño
donde mecer
la esperanza.
Latidos de otoño
para una nana.
12 comentarios:
Si de algo estoy segura, es que cerquita de ti, se ensancha el cielo.
Un beso Marisa y gracias siempre por la belleza y la esperanza que destilan tus versos.
No hay mejor nana para acunar que la que mueve la brisa de tus versos.
Bss
Como una dulce nana suenan tus versos otoñales.
Besos.
Felicidades por este hermosísimo canto de bienvenida a la vida que queda fundido, como acostumbras, con la imagen que lo acompaña. Un abrazo, Xanela.
El otoño es lo que tiene, querida Marisa, sembramos para recoger en la ansiada primavera.
Cuánta belleza en tus versos.
Un abrazo
Que mejor que una nana para esa verde luz. Un saludo Marisa.
Todo continua al ritmo pausado del otoño, suave...suave como una nana.
Besos
La vida no se para, se abre camino incluso en los lugares más imposibles.
Este poema es precioso, querida Marisa.
El otoño es una cuna donde mecer la esperanza, donde llenarse de fragancias y colores, donde dejarnos abrazar por ese latido.
Besos!!!
Visión alternativa del otoño. Se agradece.
Abrazos, siempre
Sí mezaos la esperanza mientras aún nos quede alguna.
Bello.
Besos
que bonito!
Me encantan las nanas...
Besos Marisa.
Esos latidos de una nana son los únicos que nos harán renacer hoy y mañana, y...
Besos, Xanela.
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