martes, 30 de diciembre de 2008

Margaritas de Navidad

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......Mientras los humanos disfrutan de la calidez de sus hogares
en fiestas navideñas y los campos vegetan, a vosotras se os ha
ocurrido florecer ahí fuera, a destiempo. ¿ Nadie os ha dicho que la
primavera aún no ha llegado?. ¿ Cómo osais desafiar el rocío helado
de la noche?.
...Los ténues rayos de sol apenas desharán la escarcha que se acumula
en vuestros pétalos blancos.
...Os han engañado, creíais que el veranillo de San Martín era el

preludio de vuestro renacer.
... No os han dicho que los tiempos están cambiando, que por

mucho que Al Gore y algunos más estén preocupados, hay otros
muchos que aún no se han dado cuenta.
..Os veo y me enternezco, sereis mis estrellas en los campos yermos.

sábado, 13 de diciembre de 2008

Ser un poco de ti



...Algunas personas hacen que la vida parezca más fácil, desprenden luz, y junto a ellas los problemas pierden valor. Quisiera haber aprendido algo de un ser maravilloso que era así.

...Hoy necesitaría estar en su compañía, sentir su paz, decírselo todo, lo que respiro, lo que siento. Hacerle partícipe de mis inquietudes, disfrutar de su comprensión. Contarle las novedades que fueron pasando durante todo este tiempo, mucho tiempo. A su lado las maldades eran menos malas. Sus ojos infundían verdad, en su regazo se cobijaron muchos: sus hijos, mis hijos y los hijos de muchos otros. Sus palabras reconfortaban, desvanecían el dolor causado por otras que llegaban como dagas que se clavaban y que herían. Sacaba importancia y decía que todo tenía solución menos la muerte.
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...Gracias por dejarme un referente tan fuerte en que apoyarme cuando las cosas no pintan bien. Ahora intento ser un poco de ti.
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jueves, 4 de diciembre de 2008

Sin Pena ni Gloria

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..Hoy he cogido el autobús para trasladarme a la capital, hecho que no ocurría desde hacía ya bastante tiempo. Frente a mí en uno de esos asientos puestos al revés, una mujer embarazada abraza su vientre. Sin proponérmelo empiezo a pensar en la maternidad concebida por la mayoría de los jóvenes hoy en día.


Embarazo programado, nacimiento premeditado. Futuro incierto.
Quizás alguien grande, alguien importante. Tal vez un ser anónimo, alguien que camina por la vida sin pena ni gloria. Todo eso pertenece a la probabilidad.
¿Participa el ser humano en su probabilidad?.
Quién puede vaticinar que las circunstancias que van a rodear a la persona determinarán que ésta actúe de esa y no de otra manera. Si se diese cuenta de que las circunstancias que le envuelven podrían cambiar su vida, ¿participaría para que así fuera?, o por el contrario se dejaría llevar por la rutina de todos los días.
A lo mejor querría seguir siendo lo que es sin cambiar nada.

..En posesión de su libertad tiene derecho a ser lo que quiera. Incluso a instalarse en la pereza del inmovilismo. Moralmente ¿pueden los demás interferir impunemente en la vida de otro porque según su criterio esa no es la vida que debiera vivir?. La mayoría de los mortales dirían lo mismo que Tom Wingo a Susan Lowenstein (*).
“Se debieran repartir dos vidas para que la segunda fuera aprovechada”








(*) Personajes interpretados por Nick Nolte y Barbra Streisand en el film de 1991 “El Príncipe de las Mareas”.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Fantasmas


FANTASMAS


.Esa cerrazón que te envuelve, flotando en nubarrones de hielo, no permite que el calor del amor no creído, lo llene todo, lo funda, y convierta en cálidos ríos en los que sumergirse y sentir la relajación anhelada.


La presencia de la nebulosa fría que te invade, te aburre, te incomoda, pero no puedes liberarte de ella, porque no existe. No puedes hacer que se esfume.

Es la compañera inseparable de noches no dormidas y de días no vividos. Lo ves todo irreal, lo que parece no es.


Vivir en el vacío se hizo costumbre, ya no duele tanto. Se llena de nimiedades que encallecen.


Puede parecer patético pero no tiras la toalla, crees que aún están por vivir días de plenitud, paraísos escondidos que descubrir y presencias con quien compartir.


Las primeras hojas del otoño no serán capaces de apagar el espíritu optimista latente que reflotará en primavera.


Mientras dormitarás, tu cuerpo se ralentizará y los monstruos que te habitan hibernarán. Tratarás de mantener sus avernos bien fríos para que no reaparezcan sus instintos devoradores.

domingo, 9 de noviembre de 2008

Sosiego

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Mañana dominguera, cielo azul, sol fulgurante reflejado en las blancas fachadas costeñas cobijadas por verdes montañas, guardaespaldas majestuosas elevándose con sus redondeces sensuales hacia las alturas en permanente oración de gratitud por tanta belleza.


A través de la ventana el aire, reconfortante mezcla de sal y pinos, entra a raudales en la alcoba, invade los cuerpos, los llena de vida.
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Hoy no es necesario otro alimento.


Aprisionar en el interior sensaciones de plenitud hasta la saciedad.
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Los ojos que divisan el azul intenso del mar desde la privilegiada atalaya atraen a los blancos veleros, que con sus velámenes al viento van arando surcos de paz, sosiego y tranquilidad.

Deseos de perdurar en lienzos, amalgama de blancos, celestes, turquesas y esmeraldas conformando la más bella estampa vivida y que nadie antes haya pintado.

sábado, 8 de noviembre de 2008

Xanela

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En el crepúsculo de un día apacible de Agosto, y mecida cual gaviota por las olas, descansa Xanela.

Le encanta ese continuo vaivén, las caricias y los besos con los que el mar le agasaja, formando a su alrededor festones de espuma que toda la lamen.

Unas veces vacía, otras repleta de emociones.

Todo lo aguanta, hasta los más grandes embates que los poderosos envían contra sus costados.

No hay cuidado, está bien anclada.

Ella es paciente, sabe escuchar, aunque a veces muestra su genio, sacudiéndose toda. Cambia a menudo de carácter, según le dé el viento.

Con la mar embravecida, se agita, se encabrita, protesta, pero luego cuando la calma se restablece y los cormoranes vuelan de roca en roca sobre la isla cercana, la invade una paz infinita, se siente feliz.

Le encanta ser ese punto oscuro en medio del reguero centelleante que el sol forma al atardecer. Por momentos quisiera seguir ese sendero y perderse para siempre en el horizonte.

Espera que se haga la noche y que la luna llena asome por detrás de los pinos.

Se levanta una ligera brisa y es entonces, y solo entonces, cuando sueña con la promesa de un mañana azul, en el que su capitán subirá a bordo, le contará cómo le ha ido la vida y cómo juntos surcarán los océanos empujados por el viento hacia mundos lejanos.

Xanela, mi fiel compañera.