lunes, 28 de diciembre de 2009

Cosas de invierno



La lluvia sigue cayendo

yacen los campos mojados

se han desatado los cielos

los mirlos están callados.


Sobre el monte negra nube

que abastece los regueros

que saltando entre las rocas

van inundando senderos.


Aguanta el roble desnudo

azotado por el viento

parece un triste fantasma

recién salido de un cuento.


El musgo todo lo cubre

es esponjoso aposento

de ramas secas caídas

olvidadas por el tiempo.


Se llenaría la tarde

con un triste sentimiento

si no supiera mi alma

que son cosas del invierno.

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viernes, 25 de diciembre de 2009

Bendito mar




El universo ante mis ojos

se hace agua.


Ayer monstruo que rugía,

hoy espejo que medita.


Ayer a todos desafía,

hoy con la gaviota dormita.


Dejarse llevar fluyendo

de esta belleza infinita.


Bendito mar

que mi alma resucita.

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lunes, 21 de diciembre de 2009

Escaparates y brillos

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Días de brillos y escaparates

que disfrazan las sombras

de lo humano.

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Almas que transitan

con coraza de hierro

haciendo hipocresía

lo divino.

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Vulnerable el ser

cazado en redes

de lo material

y mundano.

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Liberarse del peso

de cadenas invisibles

que oprimen con deseos

vanos.

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Desnudarse de ropajes

pegados al cuerpo que

como rémoras impiden

ser esencia.

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Espíritu puro que

se ofrece libre

haciendo de la luz

del infinito

lo posible.

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miércoles, 16 de diciembre de 2009

El velero

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Bambolea el mar

agitado

al solitario velero,

sobre crestas blancas

montado

eleva su mástil al cielo.

¿Cómo osa desafiar

a Neptuno?

-Es que no se ve

pequeño.

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sábado, 12 de diciembre de 2009

Cálido abrazo

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Haciendo de mis libros
solitaria compañía,
a las puertas del invierno
en que tu abrazo
no esperaba,
asoma radiante
tu cara a mi ventana,
y se llena mi alma
de cálida alegría.

En tu presencia ya
no hay melancolía,
se aleja la tristeza
entibiando la mañana,
me sumerjo en tus rayos
que alumbran mi mirada
y gozo el resplandor
de un nuevo día.

No me faltes nunca,
amado Sol, que sin ti
no viviría.
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martes, 8 de diciembre de 2009

Latir rimado

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Qué dulce place la tarde,

con qué discurrir soñado

aires de invierno preñado

leña de agosto que arde.


El frío que se retarde

no haga al corazón helado

porque lo quiero templado

y del ocaso me guarde.


No se mostrará cobarde

ante un mundo desalmado

se calma y late rimado,

qué dulce place la tarde.

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jueves, 3 de diciembre de 2009

La calma

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Se abre diciembre

goteando entre nubes

grisáceas.

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Titiritan los pensamientos

con las primeras

escarchas.

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Las semillas escondidas

con el frío se

aletargan.

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Quietud, sentir pleno,

los versos se hacen

alma.

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Corazón, latir sereno,

al calor del hogar

la calma.


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